La decadencia del otoño nos hace ponernos melancólicos, tanto como si nos detuviésemos delante de un cuadro y quisiéramos atravesarlo. Esta editorial, nos traslada a tiempos pasados, evocando como si de un sueño se tratase, el renacer de la opulencia barroca.
La naturaleza cambiante de esta estación se contrapone con lo perenne del saber hacer, el gusto por los detalles y la sensibilidad que estas vibrantes imágenes nos transmiten.
La porcelana se caracteriza por tener un elevado nivel de resistencia, inocuidad, tacto suave y belleza. Cualidades que enaltecen la esencia de una mujer que al vestir de novia, se enfunda en un vestido con un trabajado patrón, realizado en seda brillante y, para la cual, el valor de las reliquias heredadas, se hace notar en las fabulosas joyas que la engalanan.
Una casa señorial y un monasterio son el escenario perfecto para retratar el resurgir de un pasado olvidado, que se hace visible y patente en este presente misterioso e incierto, que se confunde en el tiempo
Sólo nos queda disfrutar de cada paso.
Fotografía y coordinación: Ana Mata | Vestidos: Sara Lage | Floristería: Floristería Campo y Jardín | Espacio: Casa Rural Viejo Molino Cela | Muah: Patricia Marqués | Pendientes: Joyería los Maragatos | Tocados: Nalohart.